EL VELERO MAGNIFICO DE LA MEMORIA

EL VELERO MAGNIFICO DE LA MEMORIA

viernes, 21 de marzo de 2014

Prueba tu capacidad de memorizar.


Me escribe una opositora que tiene dudas sobre lo que supondrá cambiar su sistema de estudio al del libro, pero que no puede vivir con esa duda, y está dispuesta a dar el paso.

Para conseguir que cuando le llegue el libro lo acoja con la mente abierta y no llena de reticencias y prejuicios, le hago en público, en el chat de esta página, esta prueba que tú también puedes hacer.

Copia de la conversación sostenida:

Pues bien esta poesía es la primera estrofa de la conocida "Canción del Pirata" de Espronceda:

Con diez cañones por banda

viento en popa a toda vela

no corta el mar sino vuela

un velero bergantín.

Si no la conocías fue porque no la estudiaste de niño, pero la práctica totalidad de los chavales de España la estudió en su día, o simplemente, la oyó las veces suficientes, sin darse cuenta, como para aprendérsela de memoria.

Y cuando las cosas se han aprendido de memoria, y se les han dado algunas vueltas, incluso involuntariamente, ahí están, pese a que hayan pasado por ejemplo 30 años.

Así se aprenden los temarios de oposiciones y así se marcan las diferencias.

Es curioso como los opositores que dicen "mercantil" lo atribuyen a que están estudiando leyes, cuando en sus temarios no suele aparecer la palabra mercantil por ninguna parte. A mi parecer son muchos los que "rellenan el hueco" con "mercantil", en vez de "bergantín", porque son dos palabras muy parecidas, con las mismas vocales y en el mismo orden, las dos con acento en la última sílaba, las dos con dos sílabas que terminan exactamente igual -"er", la primera y "an" la segunda-, y acaso porque todo el mundo ha oído hablar de los buques "mercantes" y el cerebro termina por asociar todo eso y llega a la misma conclusión en opositores de diferente edad, sexo, procedencia y formación.

Pero lo realmente significativo es que, si son tantos los opositores que llegan hasta "mercantil", y no completan la poesía, por ejemplo, con goleta, fragata o algo similar, es porque, aunque no se recuerde la palabra exacta, está ahí, grabada, y la memoria conserva una huella de la palabra que una vez se grabó, una huella que no es del todo nítida, por eso la confusión, pero que es lo suficientemente profunda como para durar décadas, y nos bastaría una simple lectura para dejarla afianzada por otro tanto.

En resumidas cuentas, para quien, como esta opositora, crea que no es posible aprender cosas o temarios de memoria y que duren en el tiempo, o no conozca esta poesía, valga esta prueba "en directo", donde ella ha podido ver con sus propios ojos que sí lo es.

Santander a 21-3-2014